Cajas postales

La caja postal es un tipo de caja de cartón muy utilizada para enviar productos, sobre todo desde el auge del comercio electrónico. ¡No es debido al azar! Tiene varias ventajas que hacen que su uso es imprescindible.

¿Cuáles son las ventajas de las cajas para envíos?

Las cajas de cartón para envíos están concebidas para enviar objetos pequeños o medianos por Correos o vía otro transportista. Tienen que ser bastantes robustas para resistir a los choques, a los golpes y a la perforación durante el transporte y de hecho proteger el contenido.

Además, las cajas para envíos existen en varios tamaños diferentes, lo que permite encontrar el tamaño adecuado para enviar productos. De hecho, en Embaleo, proponemos cajas postales automontables de varios tamaños: desde el más pequeño formato 12 x 7 x 4 cm hasta el más grande A3 43 x 30 x 12 cm.

Sin embargo, a pesar de la gran variedad de tamaños propuestos, generalmente, usted necesitará calzar el producto dentro de la caja para evitar que se mueva durante el transporte y que se dañe. Le aconsejamos envolver el producto con plástico de burbujas si es frágil o colocar papel kraft arrugado dentro de la caja si es resistente.

Por fin, las cajas de envío son un tipo de embalaje ecológico. Primero, porque están hechas de cartón, materia biodegradable y reciclable por excelencia. Actualmente, es muy fácil valorar los residuos de cartón para reciclarlos. Luego, es posible utilizar varias veces la misma caja postal antes de reciclarla gracias a su solidez.

¿Qué se puede enviar con las cajas automontables de cartón ?

Es posible enviar cualquier tipo de objetos con una caja postal, a condición de que los objetos respeten las dimensiones de la caja. Cada vez es más commún ver a los comerciantes utilizar cajas automontables para enviar libros, CD, DVD, joyas, cajas de regalo, móviles o tabletas (en su embalaje de origen)... No hay límite a lo que se puede enviar con estas cajas para envíos.

Lo más importante es proteger eficazmente los productos que están adentro y cerrar la caja de manera hermética para que no se abra durante el transporte. Nuestras cajas automontables tienen una pequeña lengüeta que facilita el cierre. Pero, aconsejamos añadir un trozo de cinta adhesiva para cerrar la caja de manera segura.